Los arrendatarios de amarres para embarcaciones en el puerto de Oceanside podrían tener una tarifa fija de electricidad y agua a partir del 1 de enero, según declaró un comité asesor la semana pasada.
Hasta ahora, los servicios públicos se han incluido sin cargo en la tarifa mensual de alquiler del amarre, que se basa en el tamaño y el tipo de espacio. Esta tarifa fija adicional para los servicios públicos supone un cambio respecto a una propuesta anterior de instalar medidores individuales en los amarres.
En 2023, el comité del puerto autorizó estudios para determinar la viabilidad de instalar los medidores, una de las varias ideas que la ciudad consideró para generar ingresos adicionales destinados a las muy necesarias mejoras del puerto.
La investigación demostró que un sistema de tarifa fija ahorraría entre 7 y 8 millones de dólares en instalaciones al evitar la necesidad de equipos, software y mano de obra adicionales para los medidores, explicó Joe Ravitch, gerente de la División Portuaria.
“Es un proyecto de ingeniería eléctrica muy complejo”, afirmó Ravitch. “Nos dimos cuenta de que nos gustaría la idea de las tarifas fijas”.
Incluso sin medidores, las conexiones de servicios públicos en los muelles y pasarelas del puerto deben mejorarse o reemplazarse para cumplir con los códigos de construcción vigentes, añadió. Sólo ese trabajo costará cinco millones de dólares o más.
Según la propuesta, las tarifas mensuales adicionales de servicios públicos para el amarre recreativo más pequeño del puerto, de 7,9 metros (26 pies), serían de 13 $ para la electricidad y 9 $ para el agua, lo que suma un total de 22 $. La renta mensual de un amarre de 7,9 metros (26 pies) es de poco menos de 500 $, con un aumento de tarifa que entrará en vigor el 1 de enero de 2024.
El amarre recreativo más grande disponible, de 15,5 metros (51 pies), tendría una tarifa fija de 39 $ para la electricidad y 21 $ para el agua, lo que sumaría un total de 60 $ a la renta mensual de 1249,50 $.
Se esperaba que el aumento de las tarifas de amarre, los servicios públicos con medidor y otras medidas propuestas en 2023 generaran alrededor de $13.6 millones en ingresos adicionales durante los próximos 15 años, según un informe del personal municipal. El dinero se destinaría a ayudar a financiar el mantenimiento o la sustitución de instalaciones portuarias, como muelles, pasarelas, portones, pilotes, escollera y embarcaderos, que ya estaban pendientes.
El puerto de Oceanside cuenta con cerca de 1,000 amarres para embarcaciones recreativas y comerciales. Aproximadamente uno de cada 10 arrendatarios de amarres recreativos vive a bordo de sus embarcaciones. Los llamados “habitantes a bordo” pagarían un recargo adicional por servicios públicos que oscilaba entre $9 por un amarre de 26 pies (7.9 metros) y $31 o más por uno de 54 pies (16.3 metros).
El del puerto, James Johnson, declaró al comité que una tarifa fija es injusta para algunos arrendatarios de amarres, en particular para aquellos que pagan por vivir a bordo, pero solo permanecen en sus embarcaciones unos pocos días.
“Solo estoy en el puerto tres días a la semana”, dijo Johnson, y el resto del tiempo vive en otro lugar.
Otros opinaron que el tiempo de uso de un amarre no debería ser un factor.
“Mucha gente paga la tarifa y no lo usa, pero es su decisión”, dijo Les George, miembro del comité.
Durante años, el puerto ha tenido una lista de espera para el alquiler de amarres que, hasta marzo, contaba con 234 nombres para espacios regulares y 117 para embarcaciones de recreo.
El puerto de Oceanside se construyó en la década de 1960. Comparte un canal de entrada con la dársena para barcos de Camp Pendleton, que se construyó en 1942 al comienzo de la Segunda Guerra Mundial.
Original Story
Oceanside boaters don’t pay for utilities. That’s about to change.
