Es una estadística notable, aunque no sorprendente: de las 7,500 muestras de sangre de conductores sospechosos de estar ebrios que el laboratorio de criminalística del sheriff analizó en un periodo reciente de 12 meses, las personas que terminaron esposadas tenían un contenido promedio de alcohol en sangre de más del doble del límite legal de 0.08% para conducir.
El laboratorio de criminalística analiza pruebas de DUI para 30 agencias en la región y procesa varios miles de casos al año.
Es mucho. Pero a recientemente la Oficina del Sheriff del Condado de San Diego anunció que había asegurado una subvención de casi $543,000 para su Laboratorio Regional de Criminalística, destinada a esfuerzos para combatir la conducción bajo los efectos de alcohol y drogas. El dinero proviene de la Oficina de Seguridad Vial del estado.
La Oficina del Sheriff utilizará el dinero de la subvención de este año para financiar dos criminalistas a tiempo completo en el laboratorio, y esos empleados se especializarán en analizar muestras biológicas para detectar drogas y alcohol.
Parte del dinero de la subvención se destinará a los pasos finales para llevar las pruebas de toxicología de drogas al laboratorio de criminalística del sheriff, que está previsto que comiencen en algún momento de enero. Las pruebas de drogas han sido subcontratadas durante mucho tiempo.
Las drogas por sí solas causan conducción bajo los efectos, pero a veces los conductores combinan drogas y alcohol. Entre los conductores arrestados por DUI que tenían al menos una sustancia adicional que afectaba su capacidad entre octubre de 2023 y septiembre, la Oficina del Sheriff indicó que el promedio de alcohol en su sangre era de 0.14% —casi el doble del límite legal. Las sustancias más comúnmente detectadas en esas muestras fueron cannabis, cocaína, metanfetamina, alprazolam (conocido por su nombre comercial Xanax) y fentanilo.
La subvención de este año es aproximadamente $25,000 más que la subvención que el laboratorio de criminalística recibió el año pasado de la misma fuente. Las subvenciones anteriores de la Oficina de Seguridad Vial se destinaron a expandir las capacidades de prueba del laboratorio con nuevos equipos, capacitación y personal.
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