El pasado sábado 14 de abril por la mañana, una lancha motora pasó rápidamente frente a los surfistas justo frente a la costa y llegó a una playa poblada de Carlsbad, donde una docena de personas saltaron del barco, corrieron por la arena y se metieron en una SUV esperando en una carretera cercana.
Lo que parecía ser una operación de contrabando de migrantes fue capturado en un dramático video de celular que rápidamente se volvió viral.
El incidente provocó respuestas de varios funcionarios electos, y dos puntos de vista diferentes sobre lo que debería hacerse para desalentar las cada vez más comunes operaciones de tráfico marítimo.
El lunes, el Supervisor del condado, el republicano Jim Desmond, se unió a varios líderes municipales del norte del condado en una conferencia de prensa en la playa en Carlsbad, donde pidieron penas más duras para los contrabandistas de personas y más recursos para la Guardia Costera y la Guardia Nacional.
Algunos de ellos también culparon a las políticas estatales que proporcionan refugios y representación legal para los migrantes, al tiempo que restringen a las agencias de la ley locales de ayudar en la aplicación federal de la inmigración.
Ese mismo día, el Representante Mike Levin, demócrata de San Juan Capistrano, pidió al Presidente de la Cámara, Mike Johnson, republicano de Louisiana, que llevara un proyecto de ley bipartidista al pleno de la Cámara que extendería el límite de aplicación en el océano para las Operaciones Aéreas y Marítimas de Aduanas y Protección Fronteriza.
Levin también señaló que había apoyado una legislación para más agentes fronterizos, equipo y otros recursos, y restricciones más estrictas sobre quién puede obtener asilo. Los republicanos del Congreso mataron en febrero la amplia propuesta fronteriza que estaba vinculada a la ayuda extranjera, al menos en parte a instancias del ex presidente Donald Trump.
En su declaración, Levin no se refirió específicamente al encallamiento del bote en Carlsbad pero mencionó “incidentes recientes de embarcaciones no identificadas desembarcando en nuestra jurisdicción…”
La yuxtaposición de Levin y Desmond y otros sugiere dos bandos con el mismo objetivo, mientras hablan sin escucharse.
Los botes que transportan migrantes que llegan a las costas de California no son nuevos, pero la práctica ha aumentado en los últimos años en el condado de San Diego, desde Imperial Beach y Point Loma en el sur hasta Oceanside en el norte.
El contrabando marítimo también ha crecido significativamente en los condados de Orange, Los Ángeles y Ventura, según el Departamento de Seguridad Nacional.
En marzo de 2023, la Guardia Costera dijo que la región costera del sur de California había visto un aumento del 771 por ciento en tales incidentes desde 2017, aunque siguen siendo una pequeña parte de los intentos de cruzar la frontera en general.
Se han registrado docenas de muertes de migrantes en el mar durante ese período de tiempo y continúan, pero los funcionarios dicen que el verdadero número es desconocido. Los botes utilizados suelen ser pequeños pangas que suelen estar sobrecargados de personas y mal mantenidos. El bote encallado en Carlsbad era más sustancial que una panga, pero igualmente estaba lleno.
Se dan varias razones para el aumento de la migración marítima, entre ellas una aplicación más estricta en la frontera terrestre y la dificultad para obtener asilo.
Desmond se centró en los incidentes marítimos, pero reflexionó sobre las tendencias más amplias de migración en la frontera.
“Este aumento en los cruces ilegales de la frontera, junto con la reciente advertencia del Director del FBI, Christopher Wray, sobre las amenazas terroristas, subraya la urgencia de la situación”, dijo en un comunicado el lunes.
También sugirió que California es más un imán que otros estados fronterizos debido a la atención médica gratuita y la defensa legal que se ofrece a los migrantes.
“Incluso si las fuerzas del orden pudieran responder rápidamente a tales incidentes, la ley estatal les prohíbe coordinar con la (Oficina de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos) con fines de deportación”, agregó Desmond.
Aparte de la inmigración, las leyes estatales llamadas santuario no impiden que la policía local haga cumplir las leyes destinadas a proteger la seguridad pública. Es casi seguro que más de una de esas leyes fue quebrantada por quienes condujeron la lancha a alta velocidad hasta la playa.
Desmond también mencionó que otros estados toman “medidas significativas para asegurar sus fronteras” y sugirió que California hiciera lo mismo. Texas está actualmente en una batalla legal con la istración Biden por sus esfuerzos en la aplicación de la inmigración, que según la ley son competencia del gobierno federal.
“Instamos urgentemente al estado de California y al gobierno federal a tomar medidas decisivas”, dijo.
Aunque instó a obtener más recursos para la Guardia Nacional y la Guardia Costera, su declaración no mencionó a la Aduana y Protección Fronteriza, ni el fallido proyecto de ley de aplicación fronteriza.
Levin dijo que el año pasado habló con de las Operaciones Aéreas y Marítimas de la CBP sobre qué ayudaría a asegurar las fronteras costeras. Los agentes le dijeron que extender las aguas aduaneras de EE.UU. fortalecería su misión de interceptar el tráfico de drogas y personas en el mar.
Un proyecto de ley pendiente en la Cámara, H.R. 529 del Representante Michael Waltz, republicano de Florida, duplicaría las aguas aduaneras de EE. UU. de 12 a 24 millas náuticas costa afuera.
“La semana pasada, el Presidente Johnson no pudo llevar la H.R. 529 al pleno de la Cámara como estaba previsto originalmente debido al caos dentro de la Conferencia Republicana de la Cámara”, dijo Levin.
“Si el Presidente Johnson y el Partido Republicano se preocupan por resolver nuestra crisis migratoria, detener el flujo de fentanilo ilegal y asegurar nuestras fronteras como dicen, entonces deben llevar este proyecto de ley al pleno de inmediato. Necesitamos soluciones bipartidistas y pragmáticas. Esta es una de ellas”.
El mandato de Johnson podría estar en juego, con algunos del Partido Republicano tratando de destituirlo. Medidas amplias de aplicación fronteriza como la que los republicanos rechazaron a principios de este año ya no parecen estar sobre la mesa.
Aunque esa propuesta estaba muy inclinada hacia las prioridades republicanas, algunos del partido dijeron que no era suficiente. Otros dijeron que se oponían porque el proyecto de ley podría ayudar al Presidente Joe Biden en las elecciones de noviembre.
La economía global, la política y, más recientemente, el cambio climático seguirán aumentando las presiones migratorias en la puerta de Estados Unidos.
Décadas de estancamiento sobre la inmigración en Washington han resultado en caos fronterizo y han reducido gran parte del debate sobre este tema a acusaciones mutuas.
Claramente, tiene que haber una manera de manejar el flujo para proteger mejor las fronteras y costas de Estados Unidos, y a las personas que intentan violarlas.
En sus declaraciones, pero no incluidas en su comunicado escrito, Desmond dijo algo con lo que probablemente esté de acuerdo la gran mayoría de la gente.
“Si tratáramos a las personas humanamente, tuviéramos un sistema de inmigración que funcionara y aplicáramos esas leyes, creo que seríamos un país mucho mejor”, dijo Desmond, según 10 News. “Las personas podrían entrar con dignidad, con la cabeza en alto en lugar de venir, desembarcar en botes y tener que correr por nuestras calles”.
El problema es que no hay suficiente consenso sobre cómo hacerlo.
